lunes, 16 de marzo de 2009

El pensamiento sistémico (Roitman)

"El conformismo social es un tipo de comportamiento cuyo rasgo más característico es la adopción de conductas inhibitorias de la conciencia en el proceso de construcción de la realidad. Se presenta como un rechazo hacia cualquier tipo de actitud que conlleve enfrentamiento o contradicción con el poder legalmente constituido. Su articulación social está determinada por la cración de valores y símbolos que tienden a justificar dicha inhibición en favor de un mejor proceso de adaptación al sistema-entorno al que se pertenece.
El conformismo social se manifiesta tanto en la dimensión colectiva como en la individual. [...] Lo podemos observar en las actitudes y las decisiones tomadas durante un día cualquiera. [...] Hacemos a la perfección todo lo que rechazamos en el fuero interno. Construimos una realidad social donde la renuncia al estado de conciencia se plantea como un objetivo por el cual luchar.
El continuo hacer en esta dirección transforma lenta pero eficazmente el comportamiento social. Los sujetos se sienten identificados en un orden donde se pierde la relación entre el hacer y el pensar, al extremo que pensar es considerado una resistencia a vencer. Actuar sin unir al acto el sentido y valor ético que posibilita resistir, criticar y, finalmente, rebelarse ante una orden construye un estado de sumisión colectiva donde todos se defienden a sí mismos y con ello defienden al otro. [...]
El conformismo social se edifica sobre estructuras mentales de carácter complaciente, mutando la condición humana y negando su naturaleza ética. [...] Al señalar que teje redes cuyo objetivo es atrapar a todo tipo de sujetos, independientemente de sus ideologías, sus formas de vida y de pensar, indicamos su elevado grado de cobertura. [...] El sistema, nuevo Leviatán, se apropia de la conciencia logrando que los individuos entreguen su voluntad de actuar y pensar al orden sistémico. El pacto social se fundamenta en inhibir conductas antisistémicas.
Las estructuras mentales del conformismo social modifican la conducta y alteran los significados sociales del comportamiento colectivo. El yo ético-consciente es reemplazado por "otro" yo, y un alter ego autocomplaciente. [...] Aparece un carácter prototípico del conformista social perfectamente habituado a desarrollar su comportamiento a partir de interiorizar las estructuras mentales del social-conformismo: un sujeto sin responsabilidades, llenos de culpas y sin confianza, salvo la derivada de los principios autorreferenciales que produce el pensamiento conformista. [...] Las estructuras mentales del conformismo social pretenden construir una acción y una relación social lo más simplificadora de la realidad posible. [...]
Queremos el bien, somos amantes de la democracia y respetamos la libertad del otro. Todo ello, siempre y cuando no implique la renuncia a ninguno de nuestros deseos e intereses. El esfuerzo por realizar el bien debe ser el mínimo posible y debe tener repercusión social , gozar del reconocimiento de los demás. No se trata de guardar el anonimato ni actuar por convicción. Realizamos obras por interés. Se actúa cuando se nos va a recompensar y sube nuestra cotización en el "mercado de valores humanos". [...]
La justificación permanente nos facilita el por qué de ella y damos cumplida cuenta por medio de largas explicaciones racionalmente construidas y finamente argumentadas. Con esta actitud queremos informar a los demás de la incapacidad por hacer cosas diferentes y contrarias al orden establecido. Queremos que todos hagan lo mismo, se conformen y sean autocomplacientes, pierdan su voluntad para evitar sufrir consecuencias no deseadas. [...]
Universalizar una razón cultural no es tarea fácil, requiere una gran capacidad para imponer una cosmovisión, unas razones y unos valores acordes a un proyecto de dominación política donde la letra y la música deben ir al mismo compás. No se puede desafinar, no es posible realizar ensayos. La contingencia y la incertidumbre constituyen parte del tiempo histórico imposibilitando la construcción de futuros apriorísiticamente definidos. para obtener el control de parte de los tempos de dicho proceso es obligatorio planear, diseñar y orientar los procesos de socialización y toma de decisiones, al mismo tiempo que dotar de sentido a las acciones sociales que van moldeando la realidad.
Las construcciones históricas son a posteriori, se edifican con ladrillos existentes. La historia de la civilización del capitalismo se construye utilizando los ladrillos que previamente han pasado el control de calidad, se busca asegurar su edificación. La calidad de los materiales es fundamental. Tampoco es ajeno a la construcción la formación de personal adecuado. El proceso de socialización educativa garantiza la continuidad del proyecto. En esta dimensión es imperativo contar con arquitectos, ingenieros, constructores, obreros, avalistas financieros, entre otros, que compartan e interioricen el objetivo y reproduzcan en sus comportamientos la razón cultural y la civilización material del capitalismo."


Marcos Roitman, "El pensamiento sistémico, los orígenes del social conformismo", 2003.

No hay comentarios:

Publicar un comentario